domingo, 27 de diciembre de 2015

Viajando al sur

Viajando al sur,
al sur
del alma
donde uno se reencuentra con la esencia de las cosas,
donde uno regresa al casi origen.
He tenido que aceptar lo vivido.
He dado gracias por lo mucho que la vida me ha dado.
He decidido aprovechar cada minuto
de este paréntesis
alejado del gris asfalto
y percibir los colores de la tarde,
la luz irisada de la luna
entre las desaparecidas alamedas.
He encontrado
un lagarto muerto entre las farolas
de esta finca enrejada.
Contemplaré
la tarde
con otros ojos y con la mente puesta
en tu dulce recuerdo.

sábado, 26 de diciembre de 2015

En la placeta de Jesús Despojado

Un diciembre primaveral en Granada. 
En la placeta de Jesús Despojado,
cerca del colegio Tierno Galván,
los niños juegan.
Al otro lado un bar repleto de gente,
que acoge la reunión anual
de la familia.
Me siento ajeno al entrar.
Aquellos que en otro momento de la vida
eran
tan cercanos,
hoy los veo como sacados de un álbum
cubierto del polvo de un armario anacrónico:
tan extraños.
Música desafinada
de abrazos, besos, convenciones
varias,
usos de clase media,
de burguesía gastada,
arrabales de clase obrera,
islotes que resisten
el paso del tiempo.
Después de todo,
no amo esta idea de gran familia unida,
actores y actrices sobreactuados,
aunque todavía existan afectos, vínculos trabados.
Es positivo que los niños
conozcan sus orígenes. 

jueves, 24 de diciembre de 2015

Distancia

No lo diré demasiado alto.

Es más. Será como un dulce susurro:

La palabra es distancia.

Pero te agradezco que hayas puesto luz en mi vida.

Que hayas delimitado los renglones,

hayas corregido la ortografía,

la sintáxis y la métrica.

Porque ahora todo está más claro.

Las ciudades, después del amor

Las ciudades, después del amor
quedan fragmentadas, divididas por un río
por el que fluyeran aguas de un
pesar calculado y antíguo,
de un olvido que está lleno
de memoria,
de lentas llamas
que siguen surgiendo
espaciadas en el tiempo
o que se agrupan todas al unísono.

Después del amor,
hay todavía más amor
porque es la energía que nos mueve
pese a todo,
el impulso que nos empuja
hacia adelante,
la palabra cálida que nos acoge,
la arquitectura de los nuevos barrios
de ciudades nuevas
dentro de cada ciudad.

Y las ruinas que quedan
se pueden restaurar.
Otras se quedan como anatomía muerta de un cuerpo sin vida.
Las que se pueden arreglar,
el paciente artesano las repara como si fuesen
un cuadro antíguo, en el que
cada rincón de un lienzo,
necesitase profundidad,
y color.

Las ciudades, después del amor,

siguen siendo ciudades.  

martes, 15 de diciembre de 2015

Cuando cae el telón

Dedicado a mis Lara y Katienka personales 

La tarde murmura palabras huecas
desde un deshabitado palco de un amplio teatro ,
desde el que se presencia el espectáculo
de las horas que se llenan
de un alboroto inesperado,
de brevedad impuesta
por la propia vida,
compuesta de momentos mínimos,
instantes donde se aprecia
una floreciente alegría,
en
cada isla melancólica
de este mar agitado.

Por la ventana construída en la escena entra una luz
que, en su reflejo,
dibuja aspas doradas,
e incluso
triángulos a los que le faltan
algunos de sus vértices.

Los sueños aprendieron a volar sin alas,
sin permiso,
contra el viento que
se arremolina en los escenarios
donde la obra avanza,
contra la adversidad
y sin desenlace aparente.

En el entreacto, comprendo que tus bellos y largos brazos estén para abrigar
a la linda y hermosa flor
que crece en tu jardín
a la que llevo en mi corazón
de manera tan cierta
como que de él brota la sangre.

Comprendo que mis brazos también la abrigarían.

Déjame ver tus ojos que sonríen, tu sonrisa que mira
cuando el telón cae
y quisiera
regresar contigo al lugar que habito.

Sonata de una tarde gris de otoño


Los días son más cortos 
en el compás de espera 
del invierno.
Es ésta una tarde gris de otoño. 
El árbol solitario 
contempla las hojas amarillentas
que cubren el suelo y que de él
ya cayeron. 
El paseante ve montículos de arena, 
naves industriales,
vías de ferrocarril 
y, a lo lejos,
la arquitectura de una ciudad 
artificiosa que 
construye un 
oscuro paisaje,
sobre el que emerge una verdad bella e impura, 
tanto como los versos 
que  junto en el camino y que te escribo 
sentado en el banco 
de un improvisado mirador. 
Algunos poemas son cartas de amor sin remitente 
pues ya la palabra denota
rasgos de la identidad del que transmite.
Las cartas de amor son listas interminables 
de ausencias, nostalgias y otras circunstancias 
que siempre contienen un destinatario. También son
un nombre propio que resuena 
en el silencio poderoso,
el deseo de acariciar
tu mano
para después besarla gentilmente y soltarla
con dulzura,
la espera sin prisa
para volver a verte.

miércoles, 9 de diciembre de 2015

Al barco nuevo


No deseo frenar al barco nuevo que soltó amarras,

y cuyas velas se orientaron

al filo del mar de la madrugada

cuando se alejó,

ya apenas se ve

su rastro sobre las aguas.

Antes de marchar en el barco nuevo que suelta amarras,

déjame ver tu rostro una vez más.

Esta travesía será larga.

El barco ha zarpado. 

He comenzado a superar tu ausencia

pues no hay más remedio.

Nada es eterno,

pero todavía así... ¿mi amor perdura?

¿Qué clase de amor es éste?

¿Cómo se puede amar a una imagen,

a un cuerpo figurado,

a una presencia que no está presente?

¿Mi amor a tu mirada fría y cálida,

a tu voz que enfría y calienta mi alma?

Elegiré abrigar mi corazón

con mantas propias

Elegiré el buen recuerdo,

la palabra sin reproche,

el caminar pausado,

el lento discurrir

de lugares donde amar y ser amado

sean la lógica cotidiana.

Elegiré mirar en mi interior.

Este es mi lugar.







miércoles, 2 de diciembre de 2015

sin decir apenas nada

Desde las factorías de la noche,
desde la sala de máquinas
de horas tardías,
desde el anfiteatro
donde se representa
la tibia oscuridad,
cuando las calles
ya semidesiertas
invocan al sonido de motores lejanos,
al ruído de las chapas de los pocos
bares que cierran,
escribo un poema que no dice apenas nada.
Porque esta nada que subyace a mi
alrededor,
combina con todo.
Es compatible con tu ausencia,
con tu presencia,
con tu recuerdo,
con tu olvido,
con la escala de grises
en la que tu amor difuminado
no ha perdido todavía
su brillo.
Como un boceto
que pasara por la mano de un pintor,
y que delimitara
con su negro carboncillo,
la silueta de una anatomía
distante e incompleta,
el alma con la que me comunico,
sin decir apenas nada.

lunes, 30 de noviembre de 2015

La rosa no buscaba la rosa...

La rosa
no buscaba la aurora:
Casi eterna en su ramo
buscaba otra cosa.

(...)


Casida de la rosa . Federico García Lorca


Sí.
Existe una realidad que emerge de la idea de que
ella 
no necesita ser salvada,
ni liberada.



Porque se salva a sí misma,
se libera a sí misma,
ella misma es su ángel redentor.



En aquel tiempo, la rosa no buscaba la rosa...


Podría intentar averigüar
pero tal vez
ella ni siquiera pedía
sentirse querida,
sentirse escuchada,
sentirse atendida,
sentirse adorada
...



La rosa no buscaba la rosa...


La luz dorada de la
tarde en otoño

me recuerda que
su sola belleza
cautiva,
embriaga,
y hace que pierda el sur,
el norte
y cada uno
de los puntos
cardinales.

domingo, 29 de noviembre de 2015

Crónica del año que va acabando

Este año que va acabando,
y que no ha terminado aún,
nos deja grandes enseñanzas,
profundas experiencias,
fragmentos de alegría,
retazos de poesía,
momentos de tristeza,
cotidiana melancolía,
avenidas grises y cielos de hormigón.
Luces y sombras
del ayer todavía.

Este año que va acabando,
no ha sido como el anterior.
Un tiempo diferente,
flexible
como el tallo de un junco
en la orilla de un río.
Aromático
como rosas tempranas
en el jardín primaveral.

Este año que va acabando
nos lleva
a deshacernos
de la cadena
que nos conduce
a ser esclavos del pasado.
A desasirnos
del poder que le hemos otorgado
a tanta cuestión banal.

Sólo la historia
nos dirá
pues es maestra de historias.


sábado, 28 de noviembre de 2015

Hay poemas

Hay poemas 
que se escriben solos. 
Provienen del silencio, desde el que nacen,
y crecen en tamaño como los arroyos 
que se ensanchan hasta hacerse ríos.

Hay poemas que son invocaciones, 
llamadas telefónicas no realizadas,
conversaciones no mantenidas,
enumeración de deseos, 
construcción de emociones. 
El deseo no cambia nada,
pero edifica la senda,
abre el camino,
de la emoción almacenada.

Hay poemas 
que sirven 
para llenar tanta ausencia de tí,
para reordenar las ideas,
y buscar salidas 
a los complejos laberintos
en los que habita el alma.

Hay poemas que lo dicen todo,
hay palabras que no significan nada.
El verbo que se eleva a sí mismo
al filo de la medianoche, 
llega más alto 
si no exige demasiado. 

Hay poemas
que se escriben
y uno los guarda. 
Este nació del silencio 
para expresar la alegría 
que supone 
el recuerdo de tu sonrisa 
y su corolario. 

viernes, 27 de noviembre de 2015

El lento amor espera

El lento amor espera,
no se apresura.
No corre en busca de,
no se refugia
en cómodas butacas,
se recicla a cada instante,
vive al día
y camina despacio.
El lento amor
se transforma,
en una hoja que brota de un árbol,
en una flor que brilla
con un vivo color,
en la pureza
de la luz del alba,
en un guiso
que se cuece a fuego suave.
Aprende
de cada error,
perfecciona
la técnica,
engrasa la mecánica,
rompe con los círculos viciosos.
Dice adiós a las gentes que no nos hacen bien.
Respira profundo, y continúa su marcha
como un tren que viajara por el incontenible
trayecto del presente.

Dedicado a los hermanos Quero

A los Hermanos Quero

La injusticia se muestra a sí misma. 
Hombres valientes, 
de acero callado, 
del hierro fulgente
del que están construídos los arados,
no estais solos en vuestra
siembra.
Aquí se adhieren a vuestra causa,
llegados de los diferentes lugares,
gentes anónimas
que claman
porque vuestra historia
sea contada,
porque vuestra fulgurante llama
de libertad no sea ignorada,
porque vuestro verbo justiciero
no sea desoído.
Hombres valientes de acero callado,
de metales traídos del subsuelo
ciudadano,
los disparos que se oyen
a lo lejos
no os acaban.

miércoles, 25 de noviembre de 2015

Poner distancia

Así como me tratas tú,
debería tratarte.

Para que comprendas qué se siente. 

Cuando uno ha dejado el alma,
no sólo en los versos.

Voy a poner distancia.

Nunca es tarde para hacerlo.

Distancia para sanar, distancia
para desligarme
de tu gris recuerdo.

No fue ni siquiera placentero.

Me iré sin rencor caminando las calles
como lo he hecho toda mi vida.

Me iré sin mirar atrás,
pues hace más de cuatro años
que habito en un desierto.

Quiero cambiar todo esto
y la luz que abriga mi alma
a diario, pondrá color alrededor.

Tengo tantas cosas que celebrar.
Por ejemplo, que sobreviví
a esta tormenta de verano.

lunes, 23 de noviembre de 2015

Cambiar la canción

Cambiar la canción.
Pasar la página.
No hacer siempre lo mismo.
Mirar el presente con optimismo.

El amor que te tengo
no se ensombrece.
Es resultado de una forja de años,
tras las altas paredes de esta fábrica
donde el arte es adorarte.

Fuiste la imagen que creé a través de mis
anhelos.
Eres la imagen que creo en mi mente
sin mayor esfuerzo.

Cambiar la canción.
Superar el conflicto.
Pasarán primaveras sin verte
y en cada mes del año, compuesto
por sus semanas, sus días y sus horas,
no habrá un instante en que
no piense en ti
y vengas a mí
como una lluvia que regara los campos,
como una brisa suave que trajera el aroma
de las flores.






sábado, 21 de noviembre de 2015

Realidades

"Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad.
Si lo hiciera, dejaría de ser artista."
Oscar Wilde


En esta noche
como en cualquier otra no busco tu amor,
no busco el fruto
de dulzura
desigual,
pero siembro semillas
que llenan los versos,
de palabras.
Islas,
fragmentos de esperanza.


La realidad es aceptada.


A diario,
habitas en una torre amurallada
y yo no busco tu amor
en esta noche de luna aplazada.
Porque
el afecto se guarda en alacenas
calladas,
porque no se esparcen
sobre los campos
los posibles hechos del mañana
con la única vista
puesta en la cosecha.
Porque de mi corazón,
que está lleno
de gratitud
brota
la savia nueva
que incita a tu solo recuerdo
en la tibia madrugada.


 

jueves, 19 de noviembre de 2015

hábitos

Hay hábitos que cuesta cambiar. Como el de enviar tantas cartas a sabiendas de que puede no gustarte recibirlas. Destierro esta última idea aunque debería tener en cuenta tu deseo de no ser buscada. Se me hace extraño ver un cuadro bonito, leer un poema, escuchar una música hermosa y no acordarme de ti.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Molino alto

"Cuando los odios andan sueltos, uno ama en defensa propia"

Mario Benedetti 

Molino alto,
que mueves tus aspas,
que tengas buen viento.

Que el clemente otoño
te cubra con sus bondades,
y que la esperanzadora primavera
llene los campos de trigales
para que en el verano
se recoja
el cultivo.

Molino alto,
que mueves tus aspas,
que tengas buen viento.

Enójate sólo lo preciso
cuando el cielo proponga
la tormenta
como único discurso.

Molino alto,
entiéndeme.
No tengo la fórmula mágica
pero preciso
escuchar la voz de ella,
la risa de ella,
oler el perfume del pelo de ella.

sábado, 14 de noviembre de 2015

Perdona la molestia

Perdona la molestia,
yo pasaba por aquí.

Vine a decirte que en el amor uno no debe esperar nada pero debe
entregar todo y siempre se tiene derecho
al delirio civilizado.
Ése que a veces toma la forma de un poema,
de una canción cantada a deshoras,
de un baile improvisado.
No se trata de conseguir, se trata de dar.

Perdona la molestia,
yo pasaba por aquí.

La vida nos trata de usted.
Entonces mantengamos esa distancia de respeto
necesaria, ese equilibrio frío
y reposado. 

Las personas no son objetos.

No son bicicletas, ni lavadoras,
no son comparables
a los artefactos que paran su funcionamiento,
se apagan y se desactivan.

Perdona la molestia,
yo pasaba por aquí.

No vine cargado de reproches
sino de buenas razones.

Pero es el tiempo de esperar.
Lo haremos
con alegría.
El destino lo dirá.

miércoles, 11 de noviembre de 2015

Ventana sobre una niña

Se abre una ventana sobre una niña.

Ya me hice cargo y no hay nada que demostrar.

Comprendí la trama que surge, el laberinto que construye el sentimiento.

Pero nadie disputa el cariño, nadie lucha por mantener
su cuota.

Nadie ocupa el lugar que otro deja
en los ratos de ausencia.

En su alegría, en su melancolía, en su tristeza, en todos sus estados de ánimo,
brilla su estrella.

Con su pelo castaño, sus ojos azules como ríos del Norte,
su bondad, su espontaneidad y su inocencia,
¿quién no podría quererla?

¿Quién en su sano juicio no puede conmoverse
ante la luz que irradia de su mirada?

¿Qué mente perversa malinterpreta el amor
hacia ella,
que es limpio y sin duda,
que es entregado?

¿Darle afecto como un posible vehículo
hasta conseguir otra clase de favor
de parte de su madre?
No creo.

Porque en ese aspecto
son dos amores distintos con
casuísticas diferentes.

Uno es el amor hacia una niña,
que la considero como si fuese una hija.

Otro es el amor a una mujer,
por la que combato
desde las trincheras
en las que se refugia un ejército
insurgente.



martes, 10 de noviembre de 2015

Mejor sin promesas

La promesa se vuelve vaga, vacía,
cuando sale de la boca del que la dice
para no regresar al lugar del que salió.

Mejor he de amarte sin promesas de paraísos escondidos,
tras las cortinas de una habitación.

Pensándolo de otra manera.

Mejor he de hablarte sin promesas de posibles caminos,
de trenes que parten de una estación,
de senderos que se abren
en una mañana de luz.

Mejor he de escribirte sin promesas, sin palabras
que reflejen distorsiones
de realidades,
deformaciones de solitarias calles en las cuales
se escucha un bandoneón.

Mejor sin promesas.
Si tú eres la mujer que anhelo,
dame tu mano
y que la noche nos transporte,
sin promesas,
hacia un lugar de los dos.



lunes, 9 de noviembre de 2015

Aceptar y seguir

Aceptar y seguir.
Aceptar el pasado, aceptar tu ausencia presente,
y no pensar tanto.
El abrigo que necesitan los niños es fabricado
por lentos telares
cuyos mecanismos suben y bajan
en movimiento armónico
y simétrico.
Ellos lo reciben con vivas y hurras y
una secuencia de abrazos.
Su tierno amor es
acompañado por sus alegrías infantiles,
por la comprobación
de sus progresos, por sus descubrimientos.
Ellos nos animan. Seguiremos adelante porque la vida no espera
y, porque cada mañana,
hay que levantarse para ganar el sustento.
El material. El espiritual. El colectivo.
Nada que demostrar.
Sabrás de mí por la línea que juntan los versos,
porque aprendí a no buscarte
cuando no quieres ser encontrada.

domingo, 8 de noviembre de 2015

Otra vez adiós

Otra vez adiós.
¿Cuántas veces nos habremos dicho adiós?
Por eso prefiero decirte:
Hasta la próxima

Amor y materia

Compañera,
estamos hechos de amor y de materia,
y en ese devenir
de emociones, afectos,
somos almas
y encrucijadas propias del cuerpo,
que
recuerda un aroma,
un gesto o una mirada.

Pero no se vive del recuerdo,
y el presente apremia,
la vida es cambiante.

No ocupamos posiciones fijas
en el metal cotidiano,
ni brillamos de la misma forma siempre,
con la misma intensidad.

Somos polizones de barcos que viajaron,
hacia islas
donde no se distinguía la línea del horizonte.

Compañera, somos
arena en una tormenta del desierto,
somos ráfaga que agita
las ramas del álamo.

Somos lo inevitable,
arte efímero
que se vuelve casi eterno
al invocar
a la silenciosa noche,
de fuentes calmas,
arroyos que se hacen ríos
al filo de la luz del alba.

Cartas a Josefine (y IV)

Liebe Josefine:

Es ist nicht ein Geheimnis.
Diese Zeit hat sehr kompliziert gewesen
aber habe ich sehr gelernt.
Du wirst kennen wann mein Leben einer neuer Weg habe.
Ich werde dich sagen wann bin ich bereit.

Bis dann,
vermisse ich dich sehr.



sábado, 7 de noviembre de 2015

Junto a tí

Verás, es bien simple... 
Junto a tí, 
quisiera construir 
los días, fabricar las noches, 
dormir
y amanecer juntos, 
acariciados por la luz 
de amaneceres 
templados. 
Junto a tí,
quisiera deshojar 
la flor del tiempo,
resumir 
un paisaje,
un atardecer,
una jornada,
un trabajo,
una ilusión.
Junto a tí,
quisiera cambiar la palabra deseo 
por la palabra acto,
y que el manantial
de las aguas 
más puras
nos dé de beber
como si no hubiera un mañana. 

Contra el viento y la marea

Contra el viento y la marea,
contra la desesperanza y los
malos presagios,
aprendimos a perder
para después
alcanzar los cielos.

Esa carta leída a destiempo,
ese adiós con la mano o esa mirada de tristeza sin consuelo aparente,
no nos impedirán
sentirnos plenos
cada vez que el buen recuerdo
nos invada
como un ejército sigiloso,
nítido y resplandeciente.

Contra el viento y la marea,
juntos alcanzaremos
el colorista epílogo de la tarde,
nos desharemos
de las madejas tejidas por las arañas
y, si el balance de este amor
nos cuadra,
le compondremos versos
a la lenta alegría de sabernos
unidos.




viernes, 6 de noviembre de 2015

Y de pronto...

Y de pronto... Te encontré

Sin buscarte

Desde entonces

No paro de pensar en tí

Tiempo para mí mismo



Tiempo para mí mismo,
para reordenar las ideas y tomar distancia. 
Tiempo para decidir
el camino que tomar.
Simplificar. 
Cantarme las verdades
y no llorarme las mentiras.
No estás.
Atravieso un desierto de años. 
Un desierto elegido y encontrado, a la vez.

He de elegir un lugar donde hallar 
paz. Un rincón de la casa en el que estar tranquilo.
Sin mirar atrás. 
Ya los jardines nos envolvieron
con su magia. 
No tomamos aquel tren 
pero habrá otros trenes 
que podríamos tomar. 
Esta segunda primavera 
se cocina a fuego lento.
¿Vendrás?
No contestes todavía, por favor. 
El futuro está lleno de posibilidades.
Mejor decir ojalá. 




jueves, 5 de noviembre de 2015

Antes de dormir

En este instante antes de dormir,
me digo:
Ya los ojos caen como si fuesen persianas
en tarde de caluroso julio y
los párpados pesados se hunden
como piedras en un estanque.
Ya no acierto a mirar recto al teclado
ni a la pantalla
desde la que se suceden los versos.
En esta escalinata improvisada,
colocada en los arrabales distantes
de la noche,
te digo que
además de sentirme agradecido
por la abundancia de amor
que me rodea,
quisiera
compartir este afecto contigo.
Pues bien conoces
las calles de mi barrio,
las luces y las sombras
que las pueblan.
Así como también sabes
cuánto daría por ti,
¡oh, maravilla de las maravillas!
Daría lo visible, lo invisible,
lo contable, lo incontable.

Cronica de un poema sin prisa

Crónica de un poema sin prisa.

A esta hora de la tarde,
en que voy cerrando las carpetas,
dejando el lápiz sobre el escritorio,
empezando a despedirme de los compañeros
y casi saliendo por la puerta de
la oficina,
escribo versos
que forman parte de un poema sin prisa.
Porque por más que corra,
que me apremie contra el tiempo
no llegarás antes
de lo dispuesto.
Llegarás cuando quieras,
cuando puedas, cuando la vida
lo proponga.
Llegarás cuando haya aprendido lo bastante,
cuando se den
las circunstancias,
cuando el hecho
y la palabra
se den de la mano
y este poema
sin prisa
sea conclusión,
corolario
de pequeñas armonías
incipientes.

--

miércoles, 4 de noviembre de 2015

Palabras para la alegría

Amor,
en la noche,
te escribo palabras para
la alegría.

Esta luna escondida entre nubes,
que apenas se ve,
ilumina las calles
de la ciudad
que, a estas horas,
camina a paso lento y silencioso,
con un gesto indiferente.

Amor,
desde el exilio de tí,
te escribo palabras para
la alegría
y
en esta cosa
de quererte,
se me acumulan
los motivos,
los días sin verte,
las cartas
que te escribo.

Una cosa sé.
Tienes algo que me hace feliz.
Y por eso
construyo palabras para la alegría,
para la tuya y la mía,
para la alegría de todos.



martes, 3 de noviembre de 2015

En este compás de espera

En este compás de espera,
escribo versos,
calculo una suma
en cuyos sumandos
aparecen tu nombre y el mío.
En su resultado,
la consecuencia de este amor imperfecto
que se cimenta sobre sólidas verdades
que resisten
el paso del tiempo.
No necesito despejar la incógnita,
de cuándo vendrás,
pues sé
que no te has ido,
que habitas
en mi diario recuerdo.
Dejar ir lo pasado,
esperando lo mejor
que nos aguarda.
Cultivo la esperanza,
guardo
incontables
motivos para quererte,
y eso es para mí es bastante.
En este compás de espera,
en la cotidiana incertidumbre,
acumulo motivos para la alegría,
te rezo oraciones paganas,
hago un brindis por la vida,
que es maravillosa.

lunes, 2 de noviembre de 2015

Eva le escribió a Adán

Eva le escribió a Adán
y le pidió que salieran juntos
de las sagradas escrituras,
que abandonaran los focos,
el camerino de los actores protagonistas,
y que se vistieran con ropas
nuevas tomando rumbo
hacia las calles pobladas.
Que se olvidaran
de aquel absurdo debate
sobre quién era la costilla de quién.
Que ambos eran subconjuntos de ambos.

A Adán le pareció bien
y aceptó su propuesta.

De vez en cuando
se les puede ver practicando
sus génesis
cogidos de la mano
por las calles del centro,
en parques de estilo romántico,
en atardeceres de otoño
caminando por parajes solitarios,
abrazándose
a espaldas
del mundo que les da la espalda.

Eva le escribió a Adán
y fué el comienzo
de un universo
que cabe
en la profundidad de una mirada
o en el perfume
afrutado de un abrazo,
en un adiós
en una parada de autobús
o
en los puntos suspensivos
que dejan algunos silencios.

Eva le escribió a Adán
y en su carta
había palabras precisas,
palabras justas,
como islas
de un mar llamado amor,
que forman
un archipiélago de afecto.

Eine kleine Erzählung

Es war einmal ein Garten wo die Blumen wachsten und gab es zwei kleinen Königinen und ein kleiner König. Sie lebten in ihrem Königreiche und ein Tag sie hatten wunderbare Bäume geworden.
Dann sie könnten glücklich zusammen im Wald bis der Nacht tanzen
und auch hören die magische Stille.
Das Realität der neuen Bäume warst nicht so traurig weil
sie als Vögel zu flügen gelernt haben.

domingo, 1 de noviembre de 2015

En el poema más simple

El poema más simple
no necesita de exagerados adornos,
frases complicadas,
símbolos
propios
de alguna lógica
interna.

En el poema más simple,
cobran vida las palabras,
se administran a sí mismas,
visitan
lugares comunes,
lugares recurrentes,
se asocian
para viajar en el tiempo,
como
pasajeros de una línea habitual
de autobús.

En el poema más simple,
se habla de los diversos temas
que nos preocupan,
que nos conmueven,
que nos emocionan.

En el poema más simple,
caben una flor,
tu nombre,
tu inteligencia,
tu hermosura,
todas tus virtudes
juntas.

En el poema más simple,
no hace falta tantos versos,
uno puede resumir
toda una emoción
o estado de ánimo
en una imagen concentrada
y nítida.

sábado, 31 de octubre de 2015

Bailemos otra vez

Bailemos otra vez

Sé que voy a esperarte pacientemente,
contra toda prisa, contra todo pronóstico.

Cuando la música
de las noches solitarias suene
con su asimétrica armonía,

bailemos otra vez,

juntos, separados, distantes, abrazados,
unidos como si fuéramos un solo ser,

contra la desesperanza,
contra la tristeza,
contra el tiempo
que nos mantiene
en compartimentos diferentes.

Bailemos por el simple hecho
de bailar,

de conectarnos
en la danza simbólica
de notas

que vuelan
y convierten
el aire en el fueguito
vertiginoso
que nos alumbra

Uno comprende

Salgo del edificio rumbo
al supermercado en luminoso
dia de otoño y
una imagen me sobreviene:
Un hombre con ropa deportiva
lleva en brazos
a un bebé de un año
más o menos.
La sintonía entre ambos es
total y uno comprende
en qué
consisten los mecanismos
del afecto ajeno.
Ese vínculo que se establece,
piel con piel,
alma con alma, enlazadas,
se vuelve insustituible,
se vuelve innegociable,
y entonces
uno sonríe al
comprobar qué hermoso
es ese amor,
uno coloca el gesto serio al darse cuenta de
cómo su pérdida o extravío
nos puede sacar de quicio
y de repente aparece
la palabra hermano,
la palabra piedad.

viernes, 30 de octubre de 2015

Sin prisa pero sin pausa

Sin prisa pero sin pausa...


Verás, hoy hay noche de luz naranja
y sobre el escritorio
un papel en el que apunto
todos los lugares a los que quisiera
ir contigo.
Me sobrevienen, de pronto,
unas ganas locas
de invitarte a los sitios,
de contarte
y que me cuentes
si te gustaría este o aquel lugar,
de pedir pronto que te envíen un ramo de flores,
una postal
en la que venga escrita una misiva:
"Necesito verte. Esta vida se me hace eterna
sin ti."
Y sí.
Tendré que inventar cauces nuevos
por las que el río
de mis más recónditas
verdades
se funda con tu río
de limpias certezas.

Volveré al arbol

Una hoja casi verde, casi seca,
es arrancada de un árbol,
y ya casi verde, casi seca,
sólo cambiará cuando
se descomponga.
Volveré al árbol otoñal cuando
sea el invierno.
De día ramas desnudas,
apreciaré la anatomía vegetal,
la autenticidad de
la ausencia de máscaras,
el frio despertar de los amaneceres
donde el rocio y la nieve
realizan su lento trabajo,
ofician de embajadores.
Volveré al árbol cuando sea la primavera
y las calles castigadas reciban a
las flores,
y en los jardines urbanos crezcan rosas
que el viandante corta
para ofrecer como obsequio,
souvenir de viajes
no iniciados.
El árbol se habrá vestido de hojas verdes
y su manto y su sombra
cobijarán a los paseantes.
Volveré al árbol
cuando sea verano
y la ciudad sea un desierto
de dudas y certezas,
un propósito de enmienda
mal calculado.
Volveré al árbol al siguiente otoño
y su dulce decadencia
me abrigará
con su desencanto

jueves, 29 de octubre de 2015

Los frutos de los días

Cada día recogemos
el fruto maduro del árbol.
Cada árbol, cada fruto nos ofrecen
un color, un aroma, un sabor
distintos.
Cada día, cada árbol, cada fruto,
cada color, cada aroma, cada sabor,
son únicos e independientes
y forman un casi-todo
de nuestro casi-mundo de experiencias
y aprendizajes.
Son los frutos de los días
y cada árbol
posee un nombre propio.

En cada palabra que no digo

[Sin poemas.
A partir de hoy, voy a amarte con silencios,
provocando con ausencias e inventando distancias; (...)
Mario Benedetti]



En cada palabra que no digo,
en cada silencio
programado,
en cada instante que se nos
viene no calculado,
hay un algo inconfundible
que me lleva a ti.


Por eso,
no desisto de esta empresa,
aunque
haya que repensar
el método
de la difusión
del mensaje.
Es posible que el poema
doblado, introducido
en una botella,
tirado al mar,
vaya a dar
con la arena
de la orilla de tu isla.

miércoles, 28 de octubre de 2015

Cartas a Josefine (y III)

Querida Josefine:

La vida es más sencilla desde que lo acepto,

desde que me acepto.

Ya no tengo que demostrar nada,

ya no tengo que salir en defensa propia

o ajena.

Estos versos que te escribo nacen

desde la calma.

Este amor pausado, profundo y

meditado

combina con los colores

de este otoño de hojas secas

junto a los bancos.

Se mantiene firme a cada día,

es un guiso a fuego lento,

una llamada que no es urgente.

Hay una cierta paz a mi alrededor

pues

sabemos

que en este otoño, preludio del invierno,

el amor vence ante las contrariedades.

martes, 27 de octubre de 2015

Cartas a Josefine (y II)

[Briefe an Josefine (II)]

Liebe Josefine:

Der Garten ist ruhig.

Die Kinder spielen und
heute, als gestern,
deine Lächeln ist wunderbar.

Ich möchte nicht zu Hause kommen.

Ich will in dem Park mit dir bleiben
bis die Nacht ohne Sterne
komme.

Jetzt, hat das Futur gekommen.
Das Ende von einem Weg ist nicht das Ende.
Es ist ein Beginn wo deinen Augen scheinen.


Wir sind
ein Fluss zwischen den Baumen,
ein kleines Schloss neben den Blumen.

lunes, 26 de octubre de 2015

Arquitecturas distantes

Podemos si quieres
hacer este ejercicio.
¿Qué tal si nuestras arquitecturas
distantes se unen
libremente y construyen
con el paso
de las horas,
a tiempo y a destiempo
el edificio
alegre
del amor silencioso?

Cartas a Josefine


Montag, 26. Oktober 2015

Liebe Josefine:

Der erster Tag der Woche ist regnerisch und

gibt es tägliche Schönheit in diesem Landschaft von grauen Straßen und

so viele Menschen.

Vielleicht kann ich nicht dir helfen aber..

kam ich zu diesem Platz dir suchen.

Ich klopfte an die Tür. Es war geschlossen.

Ich könnte es später versuchen.

Leben ist ein Reise und mein Geschenk ist deine Freude.

domingo, 25 de octubre de 2015

El hoy tiene sus rincones

En lugares perdidos
contra toda esperanza
te buscaba.

              
En ciudades sin nombre
por rincones de ayer
te busqué.

              
En horas miserables
entre la sombra amarga
te buscaba.

              
Y cuando el desaliento
me pedía volver
te encontré.



José Agustín Goytisolo (Por rincones de ayer)




A J.A.G.


El hoy tiene sus rincones,
dispone sus enigmas,
como un mapa abierto por un buscador de tesoros.


El ayer quedó atrás,
y tan sólo la nebulosa del recuerdo
lo mantiene algo vigente,
trayéndonos
la crónica de días
en los que fuimos casi felices.


Pero no debemos aspirar
a ese estado de emociones a medias.


La plenitud nos aguarda
tras los muros construídos
en torno a nuestra mente,
tras las cadenas
que nos agarran
gracias a la moral caduca.


Seremos tan libres como deseemos ser.


El hoy tiene sus rincones,
y las fábricas de la alegría
ya habitan en nosotros.





sábado, 24 de octubre de 2015

Crónica del tiempo presente

El tiempo presente se va abriendo camino
a cada instante. No necesita ser recordado
y tampoco anticipado.
Es ahora y su vigencia es máxima.
El relato es en directo.
La alegría, la tristeza, la melancolía o el olvido
se narran con el verbo inmediato.


El tiempo presente
nos informa
de dónde estamos,
qué ideas nos rondan,
qué palabras queremos decir
y las organizamos.


El tiempo presente
puede ser inventado.
Podemos construir la senda,
abrir la puerta,
y rescatar los sueños aplazados.

jueves, 22 de octubre de 2015

Crónica de un Jueves 22 de Octubre

En el almanaque
se puede leer Jueves, 22 de Octubre.
Madrid y este otoño de presagios
continúan su paso
como el tren imparable
que no se detiene apenas
en ninguna estación.
Leyendo a Doctor Zhivago
en el tranvía rumbo al trabajo.
Ya hemos pasado por el triunfo de
la Revolución.
Por la ventana se divisan explanadas de tierra árida, seca,
retazos de una artificiosa civilización.
Tierra entre dos mesetas.
Fábricas, polígonos industriales,
acero, tela metálica y hormigón.
Flores de muchos mundos.
Paisaje devastador.
En el andén,
junto a la oficina,
una bandada de gorriones
levanta el vuelo
rumbo a un lugar
algo mejor
donde se escuche
el silbido del aire,
el ruído de las persianas
al ser bajadas,
la algarabía de los niños,
la risa de las mujeres,
el lento vals de la tarde,
el eco de tu voz.

martes, 20 de octubre de 2015

Lógica de una noche como ésta

Lógica de una noche como ésta
Conjuntos de realidades que se asoman
de repente
Un mundo nuevo que se abre
El calendario lo marca
No hay preocupación
que valga
Ocuparse es prioritario
Hay mucho trabajo que hacer
Bienvenidos sean los cambios
del tiempo venidero
Bienvenidos los instantes
que aparecen,
el soplo del aire fresco
en la madrugada abierta,
la construcción
que contenga
todos los nombres propios
que forman parte de nuestro
pequeño cosmos.
Lógica de una noche como ésta
Por supuesto,
están todas las razones que me llevan a ti
Los deseos
y las decisiones que toman forma
Tu dulce recuerdo
La palabra futuro


sábado, 17 de octubre de 2015

Libre

Mira mis manos.
Ya no portan anillos.


Ya mi mente
se liberó de las cadenas
de los prejuicios
de la moral dominante.


Ahora soy yo el que decide
cambiar.
Cinco años de invierno
y un verano
que surge.
Liberarme
de inercias desgastantes,
abrir nuevos espacios,
y caminar
rumbo hacia aquello que deseo,
sin descuidar
y sin dejar de cultivar,
a los pequeños y maravillosos tesoros
que tengo
por los cuales
me siento agradecido.

Cada día tengo más claro

Cada día tengo más claro,
que cada paso me acerca un poco más a ti,
que cada verso
es un pequeño escalón que subo,
que cada acto por mínimo que sea,
que cada alabanza o elogio,
es una ofrenda que te entrego.


Cada día tengo más claro,
que habrá una fecha marcada en el almanaque,
con algún color llamativo,
en que palabra y acto puedan
darse la mano
y le pueda dedicar
alguna estrofa a tu sonrisa,
sin papel ni letra,
palabras dichas.


Cada día tengo más claro,
y hasta las dudas que albergo,
lo reafirman,
que este es el camino
y ahora nadie nos detendrá.

viernes, 16 de octubre de 2015

Vientos de cambio.

Abrazo los vientos que traen cambios.
Los que agitan las ramas y forman remolinos con las hojas
secas en el suelo.
Los que construyen caminos en la tarde.
Los que revisan
el surco del sendero nuevo.


Abrazo los vientos que traen cambios.
El árbol fue semilla antes de ser árbol.
La mariposa fue gusano antes de ser mariposa.
La nube fue agua, fue aire, fue nube.
Todo lleva su tiempo.
Aceptar el proceso.
Confiar en la transformación.


Abrazo los vientos que traen cambios.
Los vientos que nos envuelven
como si fueran un cálido abrigo,
en esta tarde de octubre,
brilla el sol
y pienso en ti.







domingo, 11 de octubre de 2015

Preguntas

¿Qué será de nosotros después del beso?


¿Qué eternidad nos cubrirá con su cálido manto?


¿Qué certezas respaldarán el futuro y los días venideros?


¿Para qué tantas preguntas si vivir es presente y no un plan


programado?

Gentil recuerdo de tí

Recordar (del latín, recordare, volver a pasar por el corazón)

Gentil recuerdo de ti,
del tiempo en que podía verte,
en el que tu sonrisa
le regalaba su brillo a la tarde
con el único pero
de no poder tenerte
entre mis brazos.


Gentil recuerdo de ti.
Esta época, desde que no estás, es más veraz, es más auténtica.
Porque sabiendo quiénes somos,
cuál es nuestro alcance,
no nos vendemos
simulacros.


Gentil recuerdo de ti.
Mientras Eros y Afrodita trabajan a deshoras.






sábado, 10 de octubre de 2015

Madrugada

Madrugada en la ciudad.
Ruídos de motores cubren el asfalto.

El día fue tranquilo,
lejos del sonido de los
vehículos y del tráfico.
Uno se contenta al ver a los niños
crecer
en paz y en pequeñas islas de moderada
armonía.

Sin embargo,
las factorías del corazón
siguen trabajando a sus horas
y a deshoras.
Los resortes
del amor siguen subiendo y bajando,
las poleas
y las palancas
del deseo siguen celebrando
esa certeza
de saber que eres.

Madrugada en la ciudad.
Aunque pasen centenares de madrugadas
más sin saber de ti,
te seguiré esperando.

Dulce nostalgia

Dulce nostalgia de ti,
de tus muchos significados.
Dulce nostalgia de todo
lo que no hemos vivido,
de tu sonrisa que construye
en la tarde alegres notas musicales.
Dulce nostalgia de tu voz
firme,
de tu caminar rotundo.
Dulce nostalgia y dulce deseo.
Poética no invasora.
Llegará nuestro momento.

jueves, 8 de octubre de 2015

Eine kurze Gedicht

Ich fühle mich so allein in diese dunkle Nacht.

Du bist der möglicher Traum,
du bist einer sonniger Morgen
in der Gefilde.
Die blumen sagen ,,Hallo'' wann sie dir sehen gehen an,
und der Fluss zu dir lauft
mit einem frohe lächeln.

Die Straßen repetieren deinen Name,
das Leben ist so kurz,
du bist weit,
aber
meine Herz bleibt mit dir für immer.




miércoles, 7 de octubre de 2015

Crónica de lo que dicen que soy

Dicen que soy frívolo,
terco, malhumorado,
dicen que como niños,
que mi reputación empeora por momentos.
Pero yo les digo que vivimos en el mundo de la imagen,
del tecnicolor programado.
Que no tengo que demostrar nada a nadie,
que he de mejorar, claro que sí,
pero que me quiero de veras.

Crónica de las cosas simples

Las cosas simples
que a diario
cultivamos.

La lectura,
la cocina,
la hora del café,
la larga conversación,
el abrazo tierno,
la gimnasia del cuerpo,
la gimnasia del espíritu y del alma, el paseo,
la alquimia de las letras
que junto a mínima artesanía,
construyen de las vivencias, los versos.

Las cosas simples
que a diario
cultivamos.

La risa de los niños,
sus juegos,
sus historias,
su puzzle de afectos.

Lo que está presente en nuestra memoria.

El rostro que nos cautiva,
la sonrisa que nos emociona,
¿habrá algo más bello que verte sonreir?

martes, 6 de octubre de 2015

Crónica de un elogio

De todas
las palabras que te
elogian por sí mismas
me quedaré con las
más simples.

Puedo escribir:
Rosa,
belleza,
maravilla,
inteligencia,
dulzura.

Y no bastarían
pero son suficientes
para describir
mínimamente
tu significado.

Canción de la medianoche

La medianoche se abre paso

entre tímidas palabras

y recurro

a la poesía

como refugio.

Creo adorarte, entre versos, pensamientos e ideas que, en mí, se mantienen.

Sin embargo, hago balance.

Pienso que dediqué mucho tiempo

a construir un puente entre tú y yo,

a fundar un recuerdo.

El puente fue construido.

El recuerdo fue fundado.

A pesar de todo.

¡Qué vacío y triste me siento cuando pienso en ti!

¡Qué pocas veces recorriste este puente!

¡Qué pocas veces fundaste algún recuerdo!

Quizás es pronto para decirlo,

quizás el tiempo nos dirá.

Ahora sólo puedo pensar en lo inmediato,

en el más acá

inminente.

La historia del sabio profesor y del joven soldado

Hubo una vez
un sabio profesor
que conoció a un joven soldado.

El sabio tenía la ciencia de su lado,
la mesura, la medida,
la disciplina interior.

El joven poseía la alegría, las ganas,
la pasión, la lucha sin cuartel
y a deshoras.

Ambos discutían, ambos conversaban,
algo les unía,
a pesar de las trincheras
invisibles
que se construyen
cuando la comunicación
se quiebra.

Aunque tuvieran la misma opinión,
nunca estarían de acuerdo,
y es que una fuerza misteriosa,
les empujaba a
ser antagonistas,
a colocarse en bandos contrarios.

El sabio todo lo malinterpretaba,
veía enemigos
en los intentos de acercamiento.
El joven en su bondad tendía su mano.
Conocía el tamaño de su rencor.

Pese a todo,
el sabio enseñó con su silencio,
y sin muchas palabras,
cuál era el motivo de su discrepancia.
Y el joven empezó a comprenderlo.
Sabía ser justo, pero con él perfeccionó
la técnica.
Reconoció sus actos de arrogancia,
su profunda ceguera,
su sinrazón.
Enumeró razones que le impedían
comportarse de otra forma.

Así distantes,
El joven agradeció todo lo aprendido.

Se despidieron y ya no había
odio.
Sólo un camino solitario,
aprendizaje de vida,
hacia el interior

domingo, 4 de octubre de 2015

Crónica de un domingo gris

(...) las montañas,
los valles solitarios nemorosos,
las ínsulas extrañas,
los ríos sonorosos,
el silbo de los aires amorosos,

la noche sosegada
en par de los levantes de la aurora,
la música callada,
la soledad sonora (...)

Cántico, San Juan de la Cruz


En este domingo otoñal de presagios,
amanecí desolado.
Por la ventana, se percibía un día gris
pero, por dentro, había tormenta.
Y llovió a cántaros durante un rato.
Menos mal
que los niños
decoran con su alegría
los paisajes más oscuros.
A estas alturas
del día,
recobré algo del ánimo.
La gimnasia diaria
ayuda a levantar la moral.
En tiempos pasados, aprendimos a cantar en la lluvia,
a bailar si era necesario,
vivimos tiempos
donde la dificultad
era la cuestión cotidiana.
Por eso, frente al desaliento,
habrá un combate constructivo.
Frente a la desolación,
buscaremos razones para estar contentos.
Frente al silencio,
no lo veremos como algo malo,
entenderemos las razones de los demás,
lo adornaremos con versos.
Frente a la soledad,
aprenderemos de ella,
puede ser soledad sonora, como en los versos de San Juan de la Cruz,
o lenta dicha.
¿Sabemos todo sobre la soledad? No creo.
La soledad es una calle vacía,
un jardín desierto,
un banco no cubierto de humanidad.
Es un camino
al interior de uno mismo,
y en ese caso
la soledad puede ser musical.
Por eso, frente a la soledad,
¿qué tal si tu soledad y la mía
se unen algún día formando
una suma de soledades,
un intercambio de vivencias, una suerte de
aritmética sentimental?

sábado, 3 de octubre de 2015

Crónicas de la noche

En la noche,
rescato
momentos
para escribir unos versos
que hablen
de tí.
Ya sé. No lo has pedido,
y debería intentar antes comprender tu mundo.
Antes de darle rienda suelta
a las emociones
que se agolpan,
al sentimiento
que traspasa los umbrales
del corazón.

En la noche,
descifro
tus señales,
la escasa
información que últimamente
de tí tengo.
Verás.
Es bien sencillo.
Y es que llegué a la conclusión de
que contigo,
aunque ahora no puedas estar,
mi mundo
tiene un brillo especial.


Crónica de una creencia

Creo estar bien, pero quizás sólo es una creencia.
Lo importante es mantener el equilibrio.
Funambulista sobre el cable metálico de la
existencia.
Caer es posible, es lo pactado....
El tiempo nos ha visto caer de múltiples maneras.
Pero levantarse es necesario.
Hacer poesía gris, o con color,
en esta segunda primavera.

Crónica de una nostalgia

Esta noche no vine a cuestionar todo tu mundo.
Tan sólo vine a presentar un informe de
nostalgia de ti.
Cada día, hay señales que me hacen referencia
a algo tuyo. Un nombre escrito en la pared,
una noticia leída en un periódico,
un cartel que anuncia un espectáculo,
el amanecer en ciudades de países no tan lejanos.
Una receta de cocina,
una canción que escucho,
un poema que leo,
que repercute en mi vivencia.
Cada nostalgia se alimenta de la anterior nostalgia,
creando una sub-nostalgia,
y en esa cadena interminable con principio y sin fin,
colecciono nostalgias y subnostalgias,
que hablan
de todas aquellas cosas que me evocan a ti.
Pero ahí no queda todo.
Saber que el mundo no se para,
que la nostalgia es síntoma de la memoria,
del deseo de estar contigo,
de respirar el mismo aire que tú,
de beber el mismo agua,
de probar el mismo vino.
El mundo es amplio,
pero llegaste tú,
y, desde entonces, todo es distinto.


viernes, 2 de octubre de 2015

Crónicas del asfalto

Caminante
sobre el asfalto,
que detienes tus pasos 
para respirar profundo. 
Tantas historias que contar, 
en verso, prosa o epístola. 
Un discurso sobre 
la lluvia, 
el amor, 
pequeñas impresiones fotográficas 
de autobuses abarrotados, 
lentos paraguas mal cerrados 
en días de otoño, 
que derivan 
en fragmento. 
Un trozo de papel en el que el viandante escribe: 
"El amor es un viaje 
que uno inicia 
sin darse cuenta. 
Se reconoce por crear 
vínculos no escritos, 
sintonías no anunciadas 
por megafonía. 
El amor no hace preguntas,
ni interroga,
crece y se extiende 
como un ejército sin armas 
que fuera bien recibido."
El paseante 
retoma la ruta por calles antíguas, 
avenidas grises, 
dispuesto a seguir construyendo y profundizando sus
crónicas sobre el asfalto.